martes, 24 de noviembre de 2009

Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer: Aminetu Haidar

Imaginen que alguien como el profesor Jesús Neira hubiera pasado de largo cuando fue testigo de aquella famosa agresión. Qué duda cabe de que hubiera sido un acto sumamente cobarde. Pues bien, esa actitud se repite día a día desde hace treinta y tres años por parte del Gobierno español al negar el respaldo a las activistas saharauis.


El 25 de noviembre de 1960, hace casi cincuenta años, tres activistas políticas, Patria, Minerva y Maria Teresa, las hermanas Miraval, fueron vilmente asesinadas por la policía secreta del dictador dominicano Rafael Trujillo. Por este motivo hoy se celebra el día de la Lucha contra la Violencia de Género. Para denunciar no sólo el terror a nivel doméstico, sino también la violación y el acoso sexual que ejercen los estados, incluyendo la tortura y los abusos sufridos por prisioneras políticas.




Éste es el caso de Aminetu Haidar, una activista saharaui por los derechos humanos a la que hoy Marruecos le niega el retorno a su tierra, El Aaiún, impidiéndole el reencuentro con su madre y sus dos hijos. El estado regido despóticamente por Mohamed VI ya intentó minar su espíritu combativo, sometiéndola durante cuatro años a crueles torturas y vejaciones en una cárcel marroquí.


Hoy Aminetu, en pleno siglo XXI, con la salud muy debilitada por los abusos de un Marruecos eminentemente patriarcal, reclama el pasaporte y los papeles que le fueron arrebatados. Son muchos los que han brindado su apoyo a Aminetu: el premio Nóbel José Saramago, el músico Macaco, el coordinador general de IU, Cayo Lara, o Guillermo Toledo, en representación de la plataforma de artistas “Todos con el Sahara”, entre otros. Muchos somos conscientes de la importancia de proteger a mujeres como Aminetu, o como Sukeina Idrissi, o como Sultana Jaya. Sin embargo, el Gobierno español mira hacia otro lado, negando la asistencia a estas luchadoras que sufren una doble presión: por su compromiso político y por su condición de mujer.


Desde el Observatorio Aragonés para el Sahara Occidental y la Asociación de la Prensa de Aragón queremos recordar a esas heroínas que pacíficamente se enfrentan día a día con la violencia política y machista. No estáis solas.

Blanca Enfedaque Losantos

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Marruecos/Sáhara Occidental: Anular la nueva regla sobre los contactos con activistas saharauis

HUMAN RIGHTS WATCH

NOVIEMBRE 16, 2009

La policía recurre al permiso previo para interrumpir las visitas de extranjeros

Nueva York) - Marruecos ha adoptado otra medida regresiva para los derechos humanos al impedir las visitas "no autorizadas" de extranjeros a los hogares de activistas saharauis del Sáhara Occidental, señaló hoy Human Rights Watch.
Desde el 19 de octubre de 2009, la policía ha interrumpido cinco visitas de este tipo de periodistas y abogados de derechos humanos españoles, diciéndoles en cada uno de los casos que estas visitas requieren la autorización previa de las autoridades.

Esta práctica, que no tiene aparentemente fundamento en la legislación marroquí, representa una nueva restricción de los derechos de los saharauis y de los visitantes de la región. Anteriormente, los agentes de policía de paisano no intervenían generalmente cuando los extranjeros entraban a las casas de conocidos activistas saharauis, aunque solían vigilar abiertamente dichas visitas desde la distancia.

"Un país que se vanagloria de la apertura le dice ahora a algunos ciudadanos que no pueden decidir quién puede visitarles", señaló Joe Stork, director adjunto para Oriente Medio y Norte de África de Human Rights Watch. "Se trata de una restricción inaceptable del derecho a la libertad de asociación y el derecho a la intimidad", agregó.

Las restricciones de las visitas a los hogares de activistas saharauis coinciden con una postura manifiestamente más dura de las autoridades marroquíes con respecto a los promotores de la autodeterminación de los territorios disputados del Sáhara Occidental. Marruecos ha ejercido su control de facto sobre la antigua colonia española desde 1975, y la considera una parte integral de su territorio nacional. Otros países no han reconocido oficialmente este hecho.
Siete saharauis están detenidos desde su regreso, el 8 de octubre, de una visita a los campamentos de refugiados saharauis en Argelia, administrados por el Frente Polisario. El Polisario es un movimiento independentista que se opone a la soberanía marroquí y reclama un referendo de autodeterminación para la población del Sáhara Occidental. Las autoridades marroquíes acusaron a los detenidos de dañar la "seguridad externa del Estado" y remitieron los casos a un tribunal militar, una decisión muy poco habitual e inquietante para los civiles acusados.
El propio rey Mohammed VI ha marcado un nuevo tono con respecto a los saharauis partidarios de la autodeterminación que cuestionan efectivamente la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.

"O se es un patriota o un traidor", declaró el monarca el 6 de noviembre, con motivo del 34º aniversario de la "Marcha Verde" para la toma de control de la región. "¿Hay algún país que toleraría que un puñado de personas fuera de la ley exploten la democracia y los derechos humanos para poder conspirar con el enemigo contra su soberanía, unidad e intereses vitales?", se preguntó.

Los visitantes extranjeros a los que se obligó a salir de las casas de saharauis en los incidentes recientes eran periodistas y abogados españoles que habían viajado al Sáhara Occidental para presenciar los juicios contra saharauis y recopilar información sobre derechos humanos.

En el incidente más reciente, ocurrido el 12 de noviembre, Luis Mangrané Cuevas, abogado representante del Consejo General de la Abogacía Española (CGAE) intentó visitar a Sultana Khaya, vicepresidenta del Foro de la Mujer Lavenir Saharaui, en su casa de Boujdour. Mangrané había llegado a la región para observar el juicio contra la activista saharaui Hassana Alouate.



(Foto: Boujdour, 19 de noviembre, camino de la Comisaria.)

La policía le interceptó cerca de la casa de Khaya y le dijo que necesitaba autorización para entrar. En la comisaría le dijeron que podría encontrarse con Khaya en un café. Sin embargo, cuando los dos se sentaron a hablar en un café, llegaron agentes de policía que ordenaron a Magrané que saliera de Boujdour y le acompañaron a una parada de taxis, donde se montó en un taxi que le llevó a El Aiún.
Así se desarrollaron los cuatro incidentes previos:
Cerca de las siete y media de la tarde del 10 de noviembre, Mangrané y Dolores Travieso Darias, otra abogada española enviada por GCAE para observar el juicio, visitaron a Hassan Duihi en su casa de El Aiún. Después de una media hora, agentes de policía de paisano se presentaron en la puerta y dijeron a Duihi, miembro de la Asociación Saharaui de Víctimas de Violaciones Graves de Derechos Humanos (ASVDH), quien recibe con frecuencia visitas de extranjeros, que pidiera a los dos abogados que salieran de su casa y regresaran a su hotel. Los agentes de policía comunicaron a Duihi que tenía que obtener un permiso previo de la policía para cualquier extranjero que quisiera visitar su casa.
Cerca de las nueve y diez de la noche del 3 de noviembre, seis agentes de policía de paisano se presentaron en la casa de El-Ghalia Djimi, vicepresidente de la ASVDH, en El Aiún, durante una visita de dos abogadas españolas. Las abogadas, Inés Miranda y Araceli Fernández de Córdoba Cantizano, se encontraban en la ciudad para observar el juicio contra el activista saharaui Cheikh Amidane, en representación de la Asociación Internacional de Juristas por el Sáhara Occidental, con sede en España.

La policía informó a las abogadas que tenían que obtener un permiso del Ministerio de Comunicación para las visitas y les ordenó que salieran de la casa. Djimi llevaba años recibiendo en su casa a visitantes extranjeros interesados en los derechos humanos, sin tener que informar primero a las autoridades. Los funcionarios ahora le dijeron que tenía que solicitar su autorización por adelantado cuando quisiera recibir a visitantes extranjeros.

El 22 de octubre, agentes de policía de paisano ordenaron a dos periodistas españolas, Beatriz Mesa de Radio Cope y El Periódico, y Erena Calvo de Ser Radio y el diario El Mundo, que salieran de la casa de Sidi Mohamed Daddache, presidente del Comité de Defensa del Derecho de Autodeterminación del Pueblo Saharaui (CODAPSO), en El Aiún. Ambas reporteras viven en Marruecos y se encuentran acreditadas por las autoridades marroquíes.

El 19 de octubre, agentes de policía de paisano se presentaron en la casa de El Aiún de Hmad Hammad, vicepresidente del CODAPSO, y ordenaron la salida de Ruth Sebastián García y Simplicio del Rosario García. Los dos abogados españoles habían viajado a El Aiún para asistir al juicio contra el activista estudiantil saharaui Mohamed Berkane, celebrado ese mismo día más temprano.
Durante tres misiones de investigación entre 2005 y 2007, los representantes de Human Rights Watch visitaron muchas residencias privadas en El Aiún y Asmara, entre ellas las de activistas saharauis. Aunque fue posible observar con frecuencia agentes de policía de paisano vigilando las casas desde la distancia, no interrumpieron estas visitas.
"Los activistas pro derechos humanos, como cualquier otra persona, deben tener libertad para recibir y visitar a quién quieran, sin tener que obtener permiso", señaló Stork. "Cuando las autoridades restringen este derecho parece que están intentando interrumpir el flujo de información sobre sus propias prácticas", agregó.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Las Cortes de Aragón exigen el respeto de los derechos humanos en los territorios ocupados del Sahara Occidental

05.11.2009

El presidente del Parlamento autonómico, Francisco Pina, ha leído la declaración institucional acordada por unanimidad en la Mesa y Junta de Portavoces recientemente, en la que reiteran su defensa de los valores democráticos, constitucionales y de derechos humanos


NOTA DE PRENSA DE LAS CORTES DE ARAGON



El presidente de las Cortes de Aragón, Francisco Pina, ha sido el encargado de leer la declaración institucional sobre la Defensa de los Derechos Humanos Saharauis -habitantes del Sahara asentados en Marruecos- al inicio de la sesión plenaria de hoy, en la que el Parlamento autonómico ha reiterado, una vez más, su “preocupación por las violaciones de los derechos humanos”.
En la Declaración Institucional, los diputados de las Cortes exigen el respeto a los derechos humanos en “los territorios ocupados del Sahara Occidental, además de al inmediata liberación de todos los presos políticos saharauis, tal como demandan las organizaciones de defensa de los derechos humanos. Todo ello inscrito en estricto cumplimiento de los Tratados Internacionales”.
Tal y como acordaron por unanimidad la Mesa y Junta de Portavoces el pasado 30 de octubre, la institución legislativa se reafirma, como ya lo hiciera en junio de 2008, en la defensa de los valores constitucionales, democráticos y de derechos humanos y expresa “su firme condena, rechazo a la detención de Ali Salem Tamek, Brahim Dahan, Rachid Sghaïr, Nassiri Hamadt, Yehdih Terruzi, Saleh Loubeihi y Degja Lechgar y exigen su inmediata liberación”.
Además, Francisco Pina ha recordado, durante la lectura de esta declaración institucional, que “el pasado ocho de octubre, siete defensores de derechos humanos saharauis fueron detenidos en el aeropuerto de Casablanca (Marruecos) cuando regresaban de visitar a sus familias y amigos en los campamentos de refugiados saharauis”, una actuación que va en contra de lo recogido en varios tratados internacionales de libertades y derechos civiles y políticos, y que ha motivado a las Cortes de Aragón, como representante del pueblo aragonés, a denunciar estas prácticas y a recalcar, mediante una declaración institucional, su apuesta por los derechos humanos.